El Mediterraneo. Agencia EFE
Una mujer de 50 años falleció como consecuencia de las puñaladas que presuntamente le asestó su exmarido, B.P., quien trató de suicidarse tras el ataque. Después de recibir un aviso, una patrulla de la Guardia Civil se personó en el domicilio de la mujer, en el municipio de Artà, y halló a ambos con heridas de arma blanca.
Tanto la víctima, como el agresor fueron trasladados al Hospital de Manacor, donde la mujer murió y su expareja permanecía ayer en estado crítico tras haber sido operado de urgencia.
La víctima no había presentado ninguna denuncia por malos tratos contra el supuesto agresor, del que estaba divorciada, según reveló el instituto armado. La mujer tenía dos hijos, de 7 y 21 años, con su exmarido.
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