jueves, marzo 10, 2011

El niño Yeremi Vargas lleva ya 4 años desaparecido.

El niño Yeremi Vargas, lleva ya 4 años desaparecido. MISSING CHILD


Europa Press / Las Palmas de Gran Canaria


Hoy 10 de marzo se cumple cuatro años de la desaparición de Yeremi Vargas, el niño de Vecindario (Gran Canaria), y la Guardia Civil continúa en su búsqueda.

Un equipo "exclusivo" de nueve agentes de la Guardia Civil está destinado a investigar todo lo que puede relacionarse con la desaparición del niño, según fuentes consultadas por Europa Press.



En concreto, este equipo de nueve personas lo componen agentes tanto de Madrid (3) como de Canarias (6) y entre sus funciones se encuentra el rastreo de las llamadas que se han recibido asegurando que habían visto al pequeño.

Además, la madre del niño, Ithaisa Suárez, recibe todas las semanas la llamada de la Guardia Civil para mantenerla informada de la investigación.

La última fotografía que se hizo para el colegio sigue pegada en el cristal de muchos coches canarios y de los comercios junto a una palabra: "Desaparecido".

CANARIAS NO OLVIDA.

Eran las 13.30 horas del 10 de Marzo de 2007. Yeremi de siete años jugaba en el solar anexo a su casa junto a sus primos. Su abuela materna Herminia los llamó para almorzar desde la ventana. Todos se sentaron a la mesa menos Yeremi. El lugar donde jugaba hasta el puré que le esperaba en la mesa apenas se separaba por una escalera. De momento, de poco han servido los esfuerzos de la Unidad Operativa de la Guardia Civil, el Ejército o los investigadores de todo el mundo. Parece como si a Yeremi se lo hubiese tragado la tierra. Este 10 de marzo se cumplen cuatro años y la familia continúa con la misma agonía y angustia que el primer día.

¿Cómo se levanta uno cada mañana sabiendo que su hijo de siete años lleva desaparecido cuatro años? Ithaisa Suárez, conoce bien lo que es llevar esa agonía. El 10 de Marzo de 2007 nunca imaginó que Yeremi, tras pedirle permiso para jugar con sus primos en el solar anexo a su casa antes de almorzar ya no volviese más. El pequeño, natural de Vecindario, risueño pero algo tímido, con una mancha morada de nacimiento en el pecho, gafas y un apasionado de la película E.T. sigue en paradero desconocido.

 
Mi apoyo incondicional a  sus padres, esa madre desesperada y toda su familia.

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